P.- Inefable es el título de tu primer libro. ¿Qué significa inefable y por qué das este título a tu libro?
R.- Según la Real Academia Española, Inefable significa algo que no puede expresarse con palabras; desde bien pequeñita empecé a escribir, creo que con 12 años ya tenía algún que otro texto escrito y mi sueño siempre fue llegar a poder escribir un libro pero siempre lo vi como algo muy difícil de conseguir, y ya no hablemos de lograr que alguien lo publicase y creo que por eso le puse ese nombre.
Para mí este libro es algo tan bueno, tan tan bueno, que nunca lograré expresarlo con palabras. Es un sueño hecho realidad, al fin y al cabo.
P.-Tu poesía es fácil de entender, pero está plagada de metáforas y reflexiones que enganchan al lector ¿Qué es más importante el mensaje o la forma de comunicar el mensaje?
R.- Creo que lo más importante es la forma de comunicarlo, la forma de hacerlo llegar a la gente y que lo entienda y, al hacerlo, que algo se le remueva por dentro. El mensaje puede ser todo lo bueno, o malo, que tú quieras que sea pero si a la hora de transmitirlo no eres capaz de que se incruste dentro del alma de las personas solo habrán sido palabras que han salido por el mismo sitio que han entrado. Hay que lograr hacer pensar a las personas con lo que queremos comunicar, es de esa manera como se logran las grandes revoluciones: haciendo pensar.
P.- “Os diré, / pequeños corazones rotos, /que no había mayor gloria /que sus besos con sabor a lluvia, / que sus brazos encajaban a la perfección / con las curvas de mi cuerpo / y que, sin lugar a dudas, / prefiero su olor, / tan único, / al más caro de los perfumes”.
El amor es el hilo conductor de tu poemario y uno de los temas más importantes de la poesía. ¿Por qué es tan importante el amor en tu poesía? ¿Hay una única persona que es objeto de tu de tu amor en el poemario? ¿Por qué casi siempre existe el amor en la poesía cuando este se acaba?
R.- El amor siempre va a ser el hilo conductor de la vida, diría yo. Siempre estamos buscando querer y que nos quieran, incluso cuando no nos damos cuenta o cuando negamos que lo hacemos, ya sea intentando encontrar a tu gran amor, buscando el abrazo de un amigo, las lágrimas de alegría de tus padres cuando consigues algo por lo que te has esforzado o de tu gato cuando llegas a casa y te recibe contento. No sabemos vivir sin amor, es una enfermedad incurable que todo el mundo busca sentir. Supongo que por eso es tan importante en mi poesía, como en la de todos los poetas, porque es lo que nos mueve, es por lo que recorreríamos kilómetros por poderlo sentir al 100%, y es por esto, por lo grande que uno se cree cuando es amado y ama con todo el corazón que, al apagarse, al irse, te deja un vacío existencial que tienes que llenar de alguna forma; yo, por ejemplo, las épocas en las que más, y mejor, escribo es cuando me agrietan un poco más el corazón. Digamos que es escribir con el corazón roto te ayuda a sanarlo un poquito, es una vía de escape y sobre todo si no eres capaz de hablar de estas cosas con las personas.
No creo que haya una única persona que sea objeto de mi amor en este poemario, nadie ha sido tan importante para ello. En estos poemas recojo muchos tipos de amor: amor hacia mis padres, amor hacia mis amigos, amor hacia personas que me rompieron el corazón, amor hacia amores y, sobre todo, amor hacia mí misma, que es mi amor más importante.
P.- ¿Cuánto de tu poesía es experiencia y cuánto es imaginado para el poema?
R.- Mi poesía nunca es imaginada, y si alguno de mis poemas lo fuera tampoco tendría problema en decirlo, pero no lo es. Todo lo que escribo está relacionado con cosas que me han pasado, cosas que he logrado maquillar suficiente como para poder compartirlas con la gente sin sentirme tan expuesta.
P.-¿Qué opinas de los poetas contemporáneos y cual o cuales recomendarías para su lectura?
R.- Esto es un tema delicado porque la única vez que di mi opinión sobre un poeta contemporáneo por una red social, ese `poeta´ me bloqueó de dicha red social alegando que no tenía ni idea de lo que estaba diciendo, pero bueno, no me dejó decirle (porque me bloqueó antes) que antes de dar mi opinión sobre un tema siempre intento haberme informado de antemano para tener una base sólida.
Tengo una crítica bastante mala hacia estos poetas, los famosos poetas que han nacido de sus 5000 `likes´ en las redes sociales. No me gustan lo que le hacen a la poesía, no me gusta que la llenen de palabras tan soeces como `follar´, `tetas´, y cosas relacionadas, no es por nada, yo las utilizo en mi día a día al hablar más veces de las que me gustaría pero a la hora de la poesía, es diferente, yo siempre la he visto como algo que está por encima de lo mundano, algo delicado, merecedor de lo mejor que puedas decir, algo que embellece el mundo un poco; a veces comparo mucho la poesía con el piano o el violín, veo ambos instrumentos igual de indispensables para la armonización de la vida que una buena poesía.
Y si tuviese que recomendar a uno de los poetas que ahora están de moda, sería Elvira Sastre o Miguel Gane, pero yo siempre voy a tirar hacia Pablo Neruda, Miguel Hernández o Lorca.
P.-Parece fácil escribir, pero no es sencillo, ¿Utilizas algún método para inspirarte? ¿Qué es lo que te impulsa a escribir?
R.- Escribir es fácil, lo difícil es darle sentido y transmitir de verdad lo que llevas dentro, plasmarlo todo en el papel.
Antes solía escuchar música clásica, sobre todo piano, me hacía pensar y rascar lo que tenía dentro. También me gustaba salir a pasear por mi pueblo y pararme en los lugares donde han ocurrido las cosas que, junto a otros factores, han dado lugar a mi poesía. Pero últimamente lo único que tengo que hacer es permitirme pensar, últimamente lo tengo todo a flor de piel y no necesito nada que me ayude a sacarlo.
Lo que me impulsa a escribir son los recuerdos, recordar qué sentía en ciertos momentos y lo que me hubiera gustado haber sentido. También me impulsa el famoso `¿y si…?´y relaciono ambas cosas: pasado con el pasado que no fue.
P.- ¿Habrá un segundo libro después de Inefable?
R.- Es algo en lo que estoy trabajando ya, aunque quiero que pase algo más de tiempo, quiero que sea un libro con mucha más poesía que Inefable, pero sí, ya está en marcha.
Rocío Calderón Conesa: “…a veces comparo mucho la poesía con el piano o el violín, veo ambos instrumentos igual de indispensables para la armonización de la vida que una buena poesía”.
P.- Inefable es el título de tu primer libro. ¿Qué significa inefable y por qué das este título a tu libro?
R.- Según la Real Academia Española, Inefable significa algo que no puede expresarse con palabras; desde bien pequeñita empecé a escribir, creo que con 12 años ya tenía algún que otro texto escrito y mi sueño siempre fue llegar a poder escribir un libro pero siempre lo vi como algo muy difícil de conseguir, y ya no hablemos de lograr que alguien lo publicase y creo que por eso le puse ese nombre.
Para mí este libro es algo tan bueno, tan tan bueno, que nunca lograré expresarlo con palabras. Es un sueño hecho realidad, al fin y al cabo.
P.-Tu poesía es fácil de entender, pero está plagada de metáforas y reflexiones que enganchan al lector ¿Qué es más importante el mensaje o la forma de comunicar el mensaje?
R.- Creo que lo más importante es la forma de comunicarlo, la forma de hacerlo llegar a la gente y que lo entienda y, al hacerlo, que algo se le remueva por dentro. El mensaje puede ser todo lo bueno, o malo, que tú quieras que sea pero si a la hora de transmitirlo no eres capaz de que se incruste dentro del alma de las personas solo habrán sido palabras que han salido por el mismo sitio que han entrado. Hay que lograr hacer pensar a las personas con lo que queremos comunicar, es de esa manera como se logran las grandes revoluciones: haciendo pensar.
P.- “Os diré, / pequeños corazones rotos, /que no había mayor gloria /que sus besos con sabor a lluvia, / que sus brazos encajaban a la perfección / con las curvas de mi cuerpo / y que, sin lugar a dudas, / prefiero su olor, / tan único, / al más caro de los perfumes”.
El amor es el hilo conductor de tu poemario y uno de los temas más importantes de la poesía. ¿Por qué es tan importante el amor en tu poesía? ¿Hay una única persona que es objeto de tu de tu amor en el poemario? ¿Por qué casi siempre existe el amor en la poesía cuando este se acaba?
R.- El amor siempre va a ser el hilo conductor de la vida, diría yo. Siempre estamos buscando querer y que nos quieran, incluso cuando no nos damos cuenta o cuando negamos que lo hacemos, ya sea intentando encontrar a tu gran amor, buscando el abrazo de un amigo, las lágrimas de alegría de tus padres cuando consigues algo por lo que te has esforzado o de tu gato cuando llegas a casa y te recibe contento. No sabemos vivir sin amor, es una enfermedad incurable que todo el mundo busca sentir. Supongo que por eso es tan importante en mi poesía, como en la de todos los poetas, porque es lo que nos mueve, es por lo que recorreríamos kilómetros por poderlo sentir al 100%, y es por esto, por lo grande que uno se cree cuando es amado y ama con todo el corazón que, al apagarse, al irse, te deja un vacío existencial que tienes que llenar de alguna forma; yo, por ejemplo, las épocas en las que más, y mejor, escribo es cuando me agrietan un poco más el corazón. Digamos que es escribir con el corazón roto te ayuda a sanarlo un poquito, es una vía de escape y sobre todo si no eres capaz de hablar de estas cosas con las personas.
No creo que haya una única persona que sea objeto de mi amor en este poemario, nadie ha sido tan importante para ello. En estos poemas recojo muchos tipos de amor: amor hacia mis padres, amor hacia mis amigos, amor hacia personas que me rompieron el corazón, amor hacia amores y, sobre todo, amor hacia mí misma, que es mi amor más importante.
P.- ¿Cuánto de tu poesía es experiencia y cuánto es imaginado para el poema?
R.- Mi poesía nunca es imaginada, y si alguno de mis poemas lo fuera tampoco tendría problema en decirlo, pero no lo es. Todo lo que escribo está relacionado con cosas que me han pasado, cosas que he logrado maquillar suficiente como para poder compartirlas con la gente sin sentirme tan expuesta.
P.-¿Qué opinas de los poetas contemporáneos y cual o cuales recomendarías para su lectura?
R.- Esto es un tema delicado porque la única vez que di mi opinión sobre un poeta contemporáneo por una red social, ese `poeta´ me bloqueó de dicha red social alegando que no tenía ni idea de lo que estaba diciendo, pero bueno, no me dejó decirle (porque me bloqueó antes) que antes de dar mi opinión sobre un tema siempre intento haberme informado de antemano para tener una base sólida.
Tengo una crítica bastante mala hacia estos poetas, los famosos poetas que han nacido de sus 5000 `likes´ en las redes sociales. No me gustan lo que le hacen a la poesía, no me gusta que la llenen de palabras tan soeces como `follar´, `tetas´, y cosas relacionadas, no es por nada, yo las utilizo en mi día a día al hablar más veces de las que me gustaría pero a la hora de la poesía, es diferente, yo siempre la he visto como algo que está por encima de lo mundano, algo delicado, merecedor de lo mejor que puedas decir, algo que embellece el mundo un poco; a veces comparo mucho la poesía con el piano o el violín, veo ambos instrumentos igual de indispensables para la armonización de la vida que una buena poesía.
Y si tuviese que recomendar a uno de los poetas que ahora están de moda, sería Elvira Sastre o Miguel Gane, pero yo siempre voy a tirar hacia Pablo Neruda, Miguel Hernández o Lorca.
P.-Parece fácil escribir, pero no es sencillo, ¿Utilizas algún método para inspirarte? ¿Qué es lo que te impulsa a escribir?
R.- Escribir es fácil, lo difícil es darle sentido y transmitir de verdad lo que llevas dentro, plasmarlo todo en el papel.
Antes solía escuchar música clásica, sobre todo piano, me hacía pensar y rascar lo que tenía dentro. También me gustaba salir a pasear por mi pueblo y pararme en los lugares donde han ocurrido las cosas que, junto a otros factores, han dado lugar a mi poesía. Pero últimamente lo único que tengo que hacer es permitirme pensar, últimamente lo tengo todo a flor de piel y no necesito nada que me ayude a sacarlo.
Lo que me impulsa a escribir son los recuerdos, recordar qué sentía en ciertos momentos y lo que me hubiera gustado haber sentido. También me impulsa el famoso `¿y si…?´y relaciono ambas cosas: pasado con el pasado que no fue.
P.- ¿Habrá un segundo libro después de Inefable?
R.- Es algo en lo que estoy trabajando ya, aunque quiero que pase algo más de tiempo, quiero que sea un libro con mucha más poesía que Inefable, pero sí, ya está en marcha.