Después de la publicación de su primer libro de poesía SINTIÉNDOTE, Silvia Vaquero ha seguido trabajando y ha publicado dos libros más REVOLTIJO y VERSOS DE FUEGO, dos libros muy diferentes que tienen en común la autoría de una de las voces más jóvenes de nuestra poesía.
P.- ¿Cómo surgió REVOLTIJO? ¿Por qué llamaste a tu segundo libro de poemas REVOLTIJO?
R.- Surgió al ver que quería hablar de todo y no solo de una temática determinada. Tengo poemas sobre muchos temas diversos y puestos en conjunto son todo un REVOLTIJO.
P.- “Dame motivos / para escribir / que se me acaban las ideas”, vivir para escribir, ¿Es la poesía una motivación más de tu vida?
R.- Sí, sigo escribiendo para seguir viviendo y sigo viviendo para seguir escribiendo.
P.- Un hecho trágico irrumpe en mitad de REVOLTIJO, la muerte de tu madre. ¿Marca este hecho tu forma de concebir la poesía y la vida?
R.- Totalmente. Mi madre muere y a partir de aquí pienso en disfrutar de la vida mucho más y en no perder el tiempo porque la vida son cuatro días y ya voy por el tercero. También escribo mucho más y soy más impetuosa, ya no me paro a estar horas y horas reflexionando, lo siento, lo hago y ya. No sé cuánto tiempo me queda de vida y quiero aprovecharla al máximo.
P.- Después de REVOLTIJO publicas VERSOS DE FUEGO un poemario que parece por su temática continuación de SINTIÉNDOTE, pero sin embargo nos encontramos con una gran diferencia. ¿Qué diferencia hay entre SINTIÉNDOTE y VERSOS DE FUEGO?
R.- La gran diferencia es que es un libro de poesía erótica en su totalidad. SINTIÉNDOTE es más romántico, suave, primerizo pero en VERSOS DE FUEGO hay un paso adelante en madurez y en atrevimiento.
P.- ¿Te has mostrado a ti misma en VERSOS DE FUEGO o te has inventado un personaje diferente de Silvia Vaquero?
R.- Me he mostrado a mí misma, mi poesía soy yo en esencia, no hay actuación ninguna, soy yo desnuda y nada más. Siempre me muestro a mí misma en todo lo que escribo. Cuando hago un personaje es solo tras la cámara, en el escenario, en el teatro pero sobre el papel no interpreto, aquí siempre soy yo.
P.- EN VERSOS DE FUEGO encontramos experiencia y deseo. ¿Hay una parte real y otra inventada en VERSOS DE FUEGO?
R.- Es una mezcla. Todo es real pero juego con imaginar escenas, inventar situaciones y fantasear pero todo esto también es real, las imágenes de un sueño son reales y suceden aunque solo pasen en tu cabeza.
P.- ¿Has empezado ya tu siguiente trabajo? ¿Has pensado ya un título?
R.- Sí, ya estoy escribiendo mi cuarto poemario que se titulará MAMÁ. Mi madre se merece un libro dedicado completamente a ella. En él habrá poemas sobre la maternidad, la muerte y sobre mi madre que era una mujer extraordinaria.